Desarraigo habla de lo que se cultiva y se abona, también de hongos y enfermedades. Porque es necesario decidir qué hacer con raíces, tallos y hojas cuando ya no nutren. A través de un estilo directo y rocoso, el lenguaje busca el hueco por el que abandonar la piel, llegar a la página y convertirse en algo nuevo y vigoroso. Palabra y cuerpo en perfecta simbiosis, líquido y recipiente del transitar cotidiano.
Pilar –
Totalmente recomendable, sus poemas no te dejan indiferente y es un libro para releer.
Pilar Pareja Gil –
Palabras fuertes, amorosas.
Alambique de vida, delucha y esperanza.
Lo leí de un tirón. Bebiendoen cada verso. Alimento.
Re-nacere. Fuerzade vida.
Te pones el luto. Tequitas el luto. Aprietaslos dientes y resistes.
Tomas oxigeno y te salvas.
No “arden las perdidas” en este poemario de Esmeralda R. Vaquero, te nutren.
J. Marcos –
Una lectura inspiradora. Me guardé a buen recaudo esta reflexión de la autora:
“Somos calle, golpe abrazos / lo que molesta y acoge // Somos miles / llegamos cansadas / y sin nada que perder”
Marisol Núñez –
Un libro que te transmite todo tipo de emociones a través de sus versos. Poesía intimista, social y con mucha fuerza. Te abre por dentro, es una lectura muy recomendable para un público adulto.
Mª Ángeles Fernández –
El libro desgarra, atrapa, acoge, abraza. Aunque no seas una lectora habitual de poesía, este libro te atrapará